Situada en el norte de España, a ambos márgenes del río Ebro, la D.O.Ca. Rioja es la zona vitivinícola española más conocida, demandada e identificada con un patrón clásico de calidad, por la mayor parte de los consumidores.
Su origen se remonta a la colonización romana, durante la cual se introdujo el cultivo de la vid. Posteriormente, y debido a su privilegiada ubicación en el eje del Camino de Santiago, el viñedo se asentó en áreas monacales como San Millán de la Cogolla, Santo Domingo de la Calzada o Logroño, que se convierten en centros importantes para el comercio del vino. A principios del siglo XII, el Rey Sancho de Navarra otorga, por primera vez, protección jurídica a sus vinos; y su importancia en la economía local es tal que se dan casos como el del alcalde de Logroño que, en 1635, prohibió el paso de carruajes por las calles contiguas a las bodegas para evitar que las vibraciones de estos alterasen la calidad de los vinos.
Pero el gran salto se produce en la segunda mitad del siglo XIX. Siguiendo las prácticas bordelesas, se comienzan a elaborar nuevos vinos de la mano de Luciano de Murrieta. Posteriormente y ante el éxito obtenido, su ejemplo fue seguido por muchos otros, favorecido por la aparición de la filoxera en Francia y la gran demanda de vino generada en este país. Fueron muchos los capitales franceses y vascos que se asociaron con familias riojanas en este nuevo negocio.
En el umbral del siglo XX la terrible plaga llegó a Rioja, pero el viñedo se reconstruye a la vez que se asientan las bases para la creación del Consejo Regulador en 1926, que posteriormente introduce un sistema único de envejecimiento estableciendo los tipos de crianza, reserva y gran reserva.
La zona de producción de la actual Denominación de Origen se extiende sobre una superficie de algo más de 63.000 hectáreas en La Rioja, Álava y Navarra, a lo largo del río Ebro.
Las variedades autorizadas son las tintas tempranillo (mayoritaria y auténtico emblema de los tintos), garnacha, graciano y mazuelo; y las blancas macabeo (llamada viura en Rioja), malvasía y garnacha blanca.
Se distinguen tres subzonas bien diferenciadas entre sí:
La Rioja Alta, quizá la más emblemática, es la de mayor superficie (43.750ha.). Ocupa la parte derecha del río Ebro, entre Haro y Logroño, con una pequeña incursión en el margen izquierdo de Briones. Su clima es continental-atlántico, favorecido por la situación de la Sierra Cantabria que la protege de los fríos vientos del norte. El suelo es arcilloso-calcáreo y ferroso, con suelos aluviales en las zonas más próximas al río Ebro.
La Rioja Baja (6.600 ha.) está situada al sur de Logroño y tiene un clima mediterráneo-continental, más diferenciado de las otras zonas. Aquí la variedad garnacha es la más extendida, y tradicionalmente produce vinos de mayor cuerpo y color. Su suelo arcilloso-ferroso contribuye a ello de forma efectiva.
La Rioja Alavesa, con 13.150 ha. Comprende varios municipios de la provincia de Álava, a la izquierda del río Ebro. Ha sido la zona más tradicional en la elaboración de vinos jóvenes, siguiendo el método de maceración carbónica, lo que les da frescura y frutosidad. Su clima es muy similar al de la Rioja Alta y el suelo arcillo-calcáreo es ideal para la variedad tempranillo.
Una porcentaje muy importante de los mejores vinos españoles proceden de Rioja, la gran región histórica de tintos. Aunque esta zona ha cambiado notablemente en los últimos tiempos. La revolución vinícola y enológica que se ha vivido en todo el mundo ha dado alas a la creación de nuevas bodegas, marcas y estilos de vino. De entre los estilos habituales, el que sigue dominando la región es el de elaborar tintos poderosos y frutales que buscan la concentración y se crían con una parte importante de madera francesa nueva.
En la zona conviven grandes bodegas y grupos vinícolas con producciones millonarias, con bodegas familiares de tamaño medio y pequeñas firmas cuyo objetivo es centrarse en producciones limitadas y de calidad. Esto hace que haya muchos “riojas” en el mercado y que la diversidad sea especialmente notable.